Una de las cosas que estoy viendo más complicadas de mudarme al extranjero es llevarme a mi perro. No es fácil viajar con tu mascota y menos mudarte con ella a otro país.
A parte de tener todos su papeles en regla (cartilla, vacunas, microchip…etc) tienes que pedir un pasaporte canino. Todo esto es bastante fácil, Caballero lo tiene todo excepto el pasaporte. Lo complicado es viajar hasta allí y encontrar una casa en la que admitan animales.
De momento mi galgo se queda temporalmente en Madrid con mis padres hasta que nosotros nos asentemos en Inglaterra, pero al menos me podré llevar una replica bastante parecida que me ha hecho mi madre (http://badulakedeana.blogspot.com.es). Y digo bastante parecida porque es suave, no ladra y me acompaña a la calle.